Amicam y los 75 años del “Calvo”
Estamos celebrando el aniversario número 75 del Hospital Dr. Luis Calvo Mackenna y entre quienes celebran están los Amigos del Calvo Mackenna, Amicam, que durante años han movilizado a los chilenos, juntando millones de pesos para ayudar en el desafío del hospital de sanar a nuestros niños enfermos.
Estamos celebrando el aniversario número 75 del Hospital Dr. Luis Calvo Mackenna y entre quienes celebran están los Amigos del Calvo Mackenna, Amicam, que durante años han movilizado a los chilenos, juntando millones de pesos para ayudar en el desafío del hospital de sanar a nuestros niños enfermos.
Como director, quiero rendir homenajes a todos en este exitoso camino. Primero al Dr. Luis Calvo Mackenna, quien se dio a conocer como director de la Casa de Huérfanos de Santiago, donde impuso una acogida amorosa de los menores abandonados, con una mirada integral del quehacer sanitario. Su primera medida fue reemplazar la indicación de abandonar a los hijos, para que éstos fueran admitidos, y definir un centro de lactantes y niños “donde se les atienda, se les cuide y se les quiera”.
Calvo Mackenna fundó la Casa Nacional del Niño, instaló enfermeras universitarias enfocadas en la asepsia, laboratorios y rayos X, y cocina con dietistas y esterilización. Medidas médicas modernas, en tránsito a la construcción de un nuevo hospital para la infancia que —a su muerte— rescataría su espíritu y su nombre.
Esta visión del doctor Calvo, que pone la eficiencia médica al cuidado de los niños y a ellos siempre al centro, ha convertido este hospital en un referente en la salud, incidiendo en el desarrollo del país.
Hace 75 años el hospital comenzó con 350 camas. A partir de entonces, se desarrollaron también las especialidades, hasta alcanzar excelencia en neonatología, cirugía, cardiología, oncología y trasplante de órganos y luego de médula ósea, entre otros.
En este desarrollo notable, el equipo de este hospital ha contado, además del Ministerio de Salud, con el apoyo de actores particulares como la Fundación Kellogg; el Hospital Saint Jude de Memphis y la Fundación Aníbal Ariztía, además de muchos voluntarios.
Mención especial le corresponde a la Corporación de Amigos del Hospital Calvo Mackenna, Amicam, que ha acompañado al hospital por más de 30 años, jugando un rol muy importante. Merece destacarse que más del 40% de la superficie hospitalaria está construida o remodelada por ellos.
Amicam ha permitido el despliegue de nuestros sueños: innovar con excelencia. Algo que en un hospital público es un privilegio.